En un lugar a tiempo desconocido, los ojos de las personas exteriorizaban sus sentimientos, cambiando de color. Esas personas eran idénticas a las ahora existentes menos por lo mencionado antes.
Un día nacieron unos trillizos, los cuales tenían los ojos de distinto color. El primero los tenía blancos, con lo cual era puro y limpio; el segundo nació ciego, sin pupila; y la tercera los tenía negros, lo cual significaba que iba a ser desterrada al Arriba, lugar a donde iban todos los niños con ojos negros y grises, aunque esta había sido la primera en tenerlos negros. Los otros dos fueron aceptados en la familia pero el de los ojos blancos, Ángelus, era el favorito. Al ciego, Gen, lo enviaron a un monasterio donde se convertiría en monje y aprendería a ver sin ojos. Así; Ángelus, Gen y Briana vivieron separados sin saber ninguno de la existencia del otro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario